VOX, un
partido emergente en la política española, calificado por sus adversarios como
un partido de extrema derecha y otros muchos calificativos despectivos, ha
irrumpido con una fuerza estrepitosa en la política española. El hecho de que
la alineación de VOX le haya arrancado 12 escaños al Parlamento Andaluz,
después de que las previsiones del CIS eran de 1 a 2 escaños, han saltado todas
las alarmas en el resto de las alineaciones de la Nación.
Aunque
cualquier periodista pueda tener una opinión personal al respecto, voy a intentar ser imparcial. Por ello paso a extractar, cuales son las
políticas que ese partido propone, centrándonos en las más controversiales, y
que VOX desglosa más ampliamente en 100 puntos que usted podría leer aquí.
- Simplificación de la estructura del Estado, reducción de gastos, desmantelación progresiva de los estados autonómicos.
- Supresión de la subversiones a los partidos políticos y órganos fiscalizados afines.
- Control de Fronteras y supresión de la emigración ilegal.
- Sobre impuestos, presenta un gran paquete que reduce los impuestos por varias razones, vías y dependencias.
- Plantea medidas proteccionistas a la familia. Pretende regresar las decisiones en materia educativa a las competencias al Estado Central, poniendo en prioridad en cuanto a decisiones e intereses morales a las familias.
- Exige transparencia en la información que considera ha de ser de dominio público, en cuanto a los diferentes datos estadísticos acerca de la criminalidad y su relación con grupos específicos de la población.
- VOX se presenta con un paquete de medidas muy agresivas contra la corrupción política y el cabildeo.
- Expone un paquete de medidas destinado a proteger a la propiedad privada y los intereses de los que heredan.
- Y no es menos importante, hay que señalar que en otro grupo de medidas se nota claramente la intención de proteger las tradiciones españolas y un adueñamiento bastante efectivo del orgullo patriótico en un marco nacionalista, que el resto de las alineaciones han sabido evitar.
Yo diría que
les he ahorrado en buena medida leerse las 100 medidas de VOX, pero el lector
no debería conformarse con este extracto y por tanto tomarse un tiempo para
leerlas y formarse su propia opinión.
Los
descalificativos contra las medidas, no solo han estado muy presente en los
medios más tradicionales y conocidos por los españoles, si no que los propios partidos
han reaccionado virulentamente y sin disimulos. Sin embargo, los resultados en
las lecciones andaluzas hacen suponer, en el baremo de las emociones políticas,
que una parte significativa de la población española parece abrazar un
porciento importante de estás medidas. Este hecho no pasa desapercibido y crea
una especie de escozor que preocupa a muchas alineaciones. La manera en que VOX
ataca a los problemas que más preocupan a los españoles, es lo que más provoca
esta irritación. Lo hace desenfadadamente y esto, visto de manera muy crítica,
parece ser lo que más envidian otras alineaciones que tienen que ceñirse a un
itinerario ideológico que los ata a un lenguaje también ideológico. Dicho de
otra manera, pareciera que lo que más preocupa al resto de las alineaciones es
el carácter adilógico con que se presenta VOX a pesar de ser ubicado en una
ultraderecha que no parece muy clara.
¿Como se
patentiza esto?
Empecemos con
la alineación de ciudadanos. Ciudadanos es un partido globalista, que cree en
la liberación de los mercados y la apertura total de las fronteras y en
consecuencia en la libre circulación entre las naciones, y todo esto más haya
de la Unión Europea. Muchos ubican al señor Rivera, el líder de esta
alineación, muy cerca del presidente francés, el señor Macrón. Rivera choca de
narices con este problema migratorio que ya empieza inervar la paciencia de
muchos ciudadanos españoles. La visión empresarial de Albert Rivera nunca ha
tenido en cuenta, hasta el momento, una preocupación perceptible en cuanto a la
seguridad ciudadana y la estabilidad laboral de los españoles.
“Nosotros no
vamos a ir de la mano con los que van con Le Pen”, dijo el presidente de
Ciudadanos. Es arto conocido que Marie Le Pen lidera el único partido que
plantó cara en las elecciones pasadas, al partido de Emmanuel Macrón, La República en Marcha.
Bajo estas circunstancias, era de esperar que Albert Rivera, se posicionara al
lado de su indiscutible aliado político. En días pasados hemos visto al presidente
francés pedir disculpas y retroceder ante sus propuestas de aumentos de
impuestos y por su política de puertas abiertas. La presión vino de abajo, de
la base ciudadana. Lo más interesante es que esta base ciudadana es una
vorágine de variadísimas afiliaciones ideológicas que tradicionalmente han
estado enfrentadas. Esto, en particular, es lo que ha sorprendido a los
expertos. Trasladando este efecto de confluencias a la política española,
podríamos estar observando un fenómeno parecido y he aquí una reflexión que se
me antoja muy posible, puede que Albert Rivera aun no haya entendido el
inconveniente de no ser más explícito en estos temas migratorios. ¿Podría
Rivera cambiar de opinión? Yo pienso que sí, y que lo hará antes de Mayo del
2019.
Quienes si están dando un vuelco estratégico
notorio ante el Efecto VOX es la alineación de Podemos. Hasta el momento hemos
visto a los líderes de Podemos renegar sistemáticamente del concepto de Patria
en términos de su valor nacionalista. No obstante, ya empieza a notarse el
desgaste que ha producido esta estrategia, que si bien es muy apreciada por los
partidos separatistas, produce muchos recelos en un porciento muy elevado de la
ciudadanía. Iñigo Errejón, no sabemos si en conceso con la cúpula dirigente de
Podemos o por una convicción personal ha dicho:
"En otros países,
cuando se manifiestan por la igualdad de derechos lo hacen con la
bandera", refiriéndose a “los chalecos amarillos de Francia”. Y concluye: "y
eso me da envidia, yo quiero eso". Después agrega: "lo irresponsable
es ceder las banderas y los símbolos de pertenencia a los reaccionarios".
Evidentemente, cuando dijo "reaccionarios", se estaba refiriendo a VOX e incluso tal vez, esto constituyó una revelación no intencional de sentimientos, una envidia a las posibilidades de VOX. La retórica de Errejón es ciertamente contradictoria porque las protestas de los chalecos amarillos no tenían nada que ver con demandas de algún tipo de igualdad, si no por el aumento de impuestos, prácticamente el andamiaje económico de Podemos. Si dejó claro que le interesaba recuperar la bandera española. Un año antes el líder de la alineación se refería a “la Patria” en un concepto también muy personal.
Evidentemente, cuando dijo "reaccionarios", se estaba refiriendo a VOX e incluso tal vez, esto constituyó una revelación no intencional de sentimientos, una envidia a las posibilidades de VOX. La retórica de Errejón es ciertamente contradictoria porque las protestas de los chalecos amarillos no tenían nada que ver con demandas de algún tipo de igualdad, si no por el aumento de impuestos, prácticamente el andamiaje económico de Podemos. Si dejó claro que le interesaba recuperar la bandera española. Un año antes el líder de la alineación se refería a “la Patria” en un concepto también muy personal.
“En estos
tiempos en los que algunos manchan la palabra España al pronunciarla, en estos
momentos, la patria es lo contrario a un corrupto envuelto en una bandera, la
patria es lo contrario a una cede financiada en negro tapada por una bandera, patria
es defender los servicios públicos, patria es defender una escuela a la que
puedan ir tus hijos, defender la patria es defender que pueda haber una ley de
dependencia, defender la patria es defender que haya una sanidad para tu abuelo
y para tu abuela, defender la patria es defender que tus hijos y tus hijas no
tengan que emigrar al extranjero, defender la patria es defender que los
bomberos que apagan fuegos tengan sueldos dignos, defender la patria es que los
trabajadores públicos estén trabajando en condiciones dignas, eso es
defender la patria. Es lo contrario de los que se envuelven a la bandera de
todos ….”
En ningún
momento, los líderes de Podemos insertan la Patria en sus elementos
tradicionales, territoriales y en su más amplio elemento identitario, si no que
la anclan a la oratoria ideológica clásica de su partido. Antes de que VOX
fuera un partido interesante en la política española, Pablo Iglesias tenía una
visión más extrovertida y honesta sobre su valoración a lo que es patria.
“La identidad
España para la Izquierda una vez que terminó la guerra civil está perdida; no
sirve para hacer política. En Cataluña, en Galicia y en el País Vasco es un
agregador con el que gana la derecha. No si os dais cuenta, que yo cada vez que
voy los medios de comunicación hago contorsionismo para decir, esos patriotas
de pulserita rojigualda que venden la soberanía a Brucelas, ser patriota es
defender los servicios públicos, ser patriota es defender los derechos
sociales, pero yo no puedo decir España. Yo no puedo utilizar la bandera
rojigualda. Yo puedo pensar y decir, yo soy patriota de la democracia y por eso
yo estoy a favor del derecho a decidir y de que la educación y la sanidad sea
pública. Inmediatamente agrega, refiriéndose con toda claridad a la utilización
de la identidad de España. “La respuesta es no, no hay nada que decir; perdimos
la guerra”.
Las palabras
anteriores están recogidas en un video que no pertenece al discurso oficial de
Pablo Iglesias, si no que es toda una confesión en un ámbito más privado.
¿Este regreso
a la Patria es un pie de fuerza puesto por VOX? Yo pienso que sí y también me
atrevo a augurar que ese regreso será cada vez más progresivo y solido. Sin
duda a VOX le favorece la Patria. Como concepto había estado abandonada por
casi todas las alineaciones políticas, incluyendo la del Partido Popular. Se
notaba cierta vergüenza ha posicionarse cerca de la Patria y hasta se puso de
moda ser más europeo que español. Si en algo parecía tener razón la agru pación
de Pablo Iglesias, era la cercanía de otras alineaciones con Brúcelas y el
desplante a España como nación, fuese federada o no.
El Partido
Popular presenta una historia muy diferente porque nunca abandonó por completo
la bandera, pero si se mostraba con cierta vergüenza y se cuidaba de no
molestar a los partidos independentistas, los que por una razón estrictamente
ideológica aborrecen la identidad española. Este punto parece irrelevante hasta
que se analiza la procedencia de la mayor cantidad de votos tránsfugas hacia
VOX. El Partido Popular, se ha convertido en la fuente más abundante de estos votos
y todo el panorama político ideológico de la actualidad nos da a entender que
esto no cambiará y que en cualquier caso podría incrementarse. Sabemos que VOX
le arranca votos incluso a Podemos, pero esta alineación es mucho más estable
en ese sentido que el PP, el PSOE y Ciudadanos. Es verdad que la inestabilidad
de Podemos no está en la procedencia de los votos, si no en la perdida de
confianza en la alineación. Sin embargo, este elemento identitario español
decidirá mucho en las próximas elecciones y esto será así para disgusto de las alineaciones independentistas. Veremos un giro radical y un alejamiento marcado en
temas referentes a la independencia de Cataluña y el País Vasco y muchos más “contorsionismos”
a la hora de mencionar la palabra España.
VOX está
creando problemas internos al resto de las alineaciones, y a falta de un UPyD
resquebrajado y visiblemente desgastado, VOX llega para ocupar se espacio
vació, y lo hace con mucha más energía y reacio a ceder su posición. El Partido
Popular por sus complejos históricos, Podemos por su ideología, Ciudadanos por
su globalismo innato y PSOE exactamente por las mismas razones que Podemos.
En todo lo anterior
consiste el efecto VOX. Es difícil dudar de que este partido ya no sea el enemigo
común y secreto de todos los partidos que actualmente gobiernan, pero si es
evidente que está influyendo en el enfoque que estos dan a muchos temas que
preocupan a los españoles. En este sentido, VOX es la adrenalina que obliga a sus
adversarios a no escabullirse de esas preocupaciones.
¿Veremos a VOX en el Parlamento Español? Evidentemente sí, pero tal vez se vea desplazado por otras alineaciones por el clásico robo de carteras políticas, algo muy tradicional en la Política de España. No tengo dudas de que ya estamos viendo un anticipo de lo que sucederá en el Parlamento. Puede que los historiadores terminen divirtiéndose comparando los discursos de todas las alineaciones, de antes y de después de VOX.
¿Veremos a VOX en el Parlamento Español? Evidentemente sí, pero tal vez se vea desplazado por otras alineaciones por el clásico robo de carteras políticas, algo muy tradicional en la Política de España. No tengo dudas de que ya estamos viendo un anticipo de lo que sucederá en el Parlamento. Puede que los historiadores terminen divirtiéndose comparando los discursos de todas las alineaciones, de antes y de después de VOX.